jueves, 9 de octubre de 2008

- TIEMPO DE RECONOCER


Ha llegado el otoño un poco tardío, como si no se hubiera enterado, y lo ha impregnado todo de un cierto aire de melancolía, con unas nubes plomizas que van y vienen y con una lluvia floja insistente que lo dejó todo inmóvil, con un contorno gris y sabor a humedad. Un día para recuperar la fuerza de los sentimientos desde dentro, para atravesar los recuerdos bronceados del verano, para revelar las cosas vitales sin reservas más allá de las fronteras del tiempo. A veces nos damos cuenta, en ocasiones demasiado tarde, que nos hemos dejado atrás algo importante, pero ya no hay tiempo para salvarse, porque algunas cosas que se van no vuelven nunca y por eso vale la pena recuperarlas incluso antes de haberlas perdido.

Que tengamos sentimientos tan parecidos
que nunca nos sintamos atados
Que de todos los caminos libres
los mejores sean los que recorra contigo
Que las sonrisas de pena y ternura
sean siempre de agradecimiento
Que las gotas de pensamiento de tu nombre
no me lleven nunca por caminos de olvido

4 comentarios:

delaRosa dijo...

Tan esperado y tan magnífico que llega al alma.

Saludos.

Mar y Sol(a veces tenue y otras no) dijo...

Cuánto sentimiento mi amigo poeta...
Hermoso muy lindo lo que escribiste y gracias por tu huella en mi orilla...

*Ely* dijo...

Wow..
Hola!
cuando paso por aqui consigo a mi amigo observandolo todo... hasta el silencio...
parece un espacio de meditaciones y encuentros de tesoros inmensos... posibles hoy ...
Que hermosa manera de ver... de ver el paisaje de tu alma, de los sentimientos vivos a tu alrededor...
Gracias por compartirlo.

Nochestrellada dijo...

Gracias a vos por la visita
me gustó conocer tu burbuja otoñal!

saludos
desde la otra orilla